Gatísimo contra el mega guarén

4 Feb

Gatísimo vs Mega Guarén, x Krista

Gatísimo vs Mega Guarén, x Krista

Gatísimo es un gato gordo. Ha sido acusado reiteradamente de guatisimo, obeso, mórbido, embarazado, grasoso, cilíndrico y otros epítetos que me da pena reproducir porque el pobre solo es panzoncito y si… tiene un problema de sobrepeso, pero vamos, quién no tenga algún problema con su envergadura que tire la primera piedra.

Nadie imagina que además de pasarse gran parte del día echado bajo la sombra de un parrón o de una silla, tiene una vida activa. Los hechos hablan por si solos. Ha llegado con un magullón en su lomo, perdió totalmente el cuero cabelludo y tiene un pelón en forma de  medalla justo en la espalda.

Su adoptada (que a muchos les gusta llamar dueña) se preocupa y lo corretea para mirar qué fue. Entonces, el gato se escabulle hasta el patio, donde lo esperan tres de sus amigos. Están en un círculo casi ritual. Hay tanta solemnidad que la “responsable” de la mascota vuelve a su pieza para cambiarse tenida, pasa al baño a retocar el maquillaje y pone cara de drama para que los demás invitados no se espanten. Si algunos de ellos la reconoce, la recordará mangueriándolos para que no depositen sus desechos en la huerta, gritando como desaforada o aplaudiendo para espantarlos.

Sigilosamente, se acerca a la ronda. De lejos distingue casi nada, porque se ha quedado medio cegatona, pero se refriega los ojos queriendo ver mejor. En el centro se divisa un algo café. Sigue avanzando y ahí está. Peludo, paralizado, aceitoso e inmundo: el mega guarén.

“¡Es gigante!”, piensa la seudo dueña y se muerde la lengua para no espantar a los amigos del gato, que lo miran con admiración. Era evidente, los convidados estaban ahí para apreciar la proeza de nuestro redondo amigo, que miraba frente en alto mientras los demás lo elogiaban a puros miau, escuchaban y relataban los pormenores una y otra vez de los combos que iban y venían y de cómo Gatísimo salió raspado de lomo.

Finalmente, se dispersaron los testigos y apareció la adoptada con escoba y pala a recoger el kilo de roedor que ya empezaba a oler, depositarlo en una caja y despedirlo en su triste/heroica muerte en batalla contra el gato más valiente de esa casa.

4 Responses to “Gatísimo contra el mega guarén”